La escritura y el olvido.
Historiar un saber como la pedagogía es recorrer la dimensión de los discursos, de los sujetos, de las prácticas y de las instituciones. Recorrer, pasear y gozar el laberinto de unos procesos oscuros, de una práctica pedagógica teñida en color púrpura y engalanada posteriormente con el instrumento y...
- Autores:
-
Gantiva Silva, Jorge
- Tipo de recurso:
- Article of journal
- Fecha de publicación:
- 1989
- Institución:
- Universidad Pedagógica Nacional
- Repositorio:
- Repositorio Institucional UPN
- Idioma:
- spa
- OAI Identifier:
- oai:repository.pedagogica.edu.co:20.500.12209/5196
- Acceso en línea:
- http://revistas.pedagogica.edu.co/index.php/RCE/article/view/5187
http://hdl.handle.net/20.500.12209/5196
- Palabra clave:
- Rights
- openAccess
- License
- https://creativecommons.org/licenses/by-nc/4.0
Summary: | Historiar un saber como la pedagogía es recorrer la dimensión de los discursos, de los sujetos, de las prácticas y de las instituciones. Recorrer, pasear y gozar el laberinto de unos procesos oscuros, de una práctica pedagógica teñida en color púrpura y engalanada posteriormente con el instrumento y el rendimiento. El maestro Estanislao Zuleta tiene razón al decir que el trabajo de Humberto Quiceno es un análisis histórico de una tragedia colombiana. La tragedia construida para la uniformidad, la inhibición y la represión. Inspección y prohibición, legislación y control. ¿Qué más da? Una pedagogía católica centrada en la vigilancia y en la intimidación. Una pedagogía que no vive para vivir, sino por el miedo de vivir. Los “Pechiblancos”: Los detentadores del saber y del poder en escuelas, colegios y Normales. Pero no sólo Lasallistas, también Jesuitas, Dominicos, Calasancios, Hermanos Maristas, Salesianos, Hermanas de La Presentación, María Auxiliadora construyeron un discurso, una mirada, los “ojos en la nuca” de lo pedagógico. |
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