La importancia del buen uso de las habilidades sociales en el contexto familiar y escolar para la transformación de la educación.

“La inteligencia emocional comienza a desarrollarse en los primeros años. Todos los intercambios que los pequeños niños tienen con sus padres, los maestros y con los demás llevan mensajes emocionales”. La familia es el primer agente de socialización, más importante en la vida de un individuo, no sol...

Full description

Autores:
Muñoz Olivera, Erika
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2018
Institución:
Universidad de los Llanos
Repositorio:
Repositorio Digital Universidad de los LLanos
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repositorio.unillanos.edu.co:001/4916
Acceso en línea:
https://repositorio.unillanos.edu.co/handle/001/4916
https://repositorio.unillanos.edu.co
Palabra clave:
Habilidades sociales
Aprendizaje lúdico
Habilidades Sociales
Niños
Niñas
Escuela
Familia
Juego
Rights
openAccess
License
Derechos Reservados - Universidad de los Llanos, 2018
Description
Summary:“La inteligencia emocional comienza a desarrollarse en los primeros años. Todos los intercambios que los pequeños niños tienen con sus padres, los maestros y con los demás llevan mensajes emocionales”. La familia es el primer agente de socialización, más importante en la vida de un individuo, no solo porque es el primer agente, sino porque se constituye un lazo entre el individuo y la sociedad. De la misma forma, la escuela y la familia son las dos grandes instituciones educativas con las que cuentan los niños y las niñas para desarrollarse como ciudadanos. Por tal motivo, ni la escuela ni la familia, pueden estar separadas sin comunicación, dado que deben aportar por cumplir dicha función. Como bien expresa Bolívar1 .Formar una persona es una de las tareas más delicadas e importantes que existe en la sociedad de hoy en día, de la misma forma es que la escuela debe compartir con la familia el importante papel de proporcionar a los niños experiencias básicas que contribuirán a su desarrollo y a sus primeros aprendizajes, deben aportan su granito de arena y asumir el compromiso de participar en una tarea común para poder atender positivamente a las necesidades afectivas, cognitivas, conductuales, personales, situacionales, éticas, espirituales, comunicativas, estéticas y corporales de los niños, así como de toda la comunidad educativa. De otra manera, el desarrollo positivo de las habilidades sociales en los niños es imprescindible para la transformación de la educación dado que estas se desarrollan en primera instancia y en gran medida en la vida familiar, razón por la cual, se cuenta como una herramienta para la transformación de una nueva generación con la capacidad de desarrollar sus habilidades de manera positiva, aprendiendo a escuchar, ser serviciales, defender su posición sin faltar al respeto ni agredir, saber expresar las emociones y los sentimientos, aprender a comprender a los demás y evitar juicios dañinos, de las que nos permite las habilidades sociales desarrollar y fortalecer en el transcurso de la vida cotidiana.