Evaluacón e impacto del Decreto 3222 de 2002 Red de Apoyo y Solidaridad Ciudadana (RASCI) en Bogotá durante 2018-2024

El Decreto 3222 de 2002 que aborda la Red de Apoyo y Solidaridad Ciudadana (RASCI) ha sido esencial para la coordinación de la seguridad en Bogotá, organizando las responsabilidades de las instituciones encargadas de la prevención y control del crimen. Gracias a su implementación, ha permitido una m...

Full description

Autores:
Camargo Pardo, Julio Alejandro
Tipo de recurso:
Trabajo de grado de pregrado
Fecha de publicación:
2024
Institución:
Universidad Militar Nueva Granada
Repositorio:
Repositorio UMNG
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:repository.umng.edu.co:10654/47115
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/10654/47115
Palabra clave:
POLITICA DE SEGURIDAD CIUDADANA - COLOMBIA - BOGOTA
PARTICIPACION CIUDADANA - SEGURIDAD PUBLICA - COLOMBIA - BOGOTA
DECRETO 3222 DE 2002 (COLOMBIA) - EVALUACION
RED DE APOYO Y SOLIDARIDAD CIUDADANA (COLOMBIA) - IMPACTO SOCIAL
Decreto 3222
RASCI
Bogotá
Seguridad pública
Seguridad privada
Participación civil
Decree 3222
RASCI
Bogotá
Public security
Private security
Civilian participation
Rights
openAccess
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/
Description
Summary:El Decreto 3222 de 2002 que aborda la Red de Apoyo y Solidaridad Ciudadana (RASCI) ha sido esencial para la coordinación de la seguridad en Bogotá, organizando las responsabilidades de las instituciones encargadas de la prevención y control del crimen. Gracias a su implementación, ha permitido una mejor colaboración entre Empresas de Seguridad Privada, la Policía Nacional, la Secretaría de Seguridad Distrital y otras entidades locales, creando un enfoque más eficaz en la seguridad ciudadana. Sin embargo, al evaluar su impacto entre 2018 y 2024, surge una preocupante falta de actualización que limita su capacidad para enfrentar los nuevos desafíos criminales de la ciudad, como las modalidades de hurto, homicidios, violencia intrafamiliar y las nuevas formas de criminalidad urbana. Este vacío normativo también se refleja en las encuestas realizadas a la población civil, guardas de seguridad y policías, que representan a la sociedad, la seguridad privada y la seguridad pública. Los resultados muestran que, a pesar de la estabilidad generada por el RASCI en la organización de acciones preventivas y reactivas, la realidad social y criminal de Bogotá ha cambiado considerablemente, y el decreto no ha evolucionado para abordar estos nuevos retos. Además, persisten problemas como la desigualdad en la distribución de recursos y la limitada participación de la sociedad civil en las estrategias de seguridad, lo que afecta principalmente a las zonas más vulnerables. En estas áreas, la presencia de las autoridades sigue siendo insuficiente, deteriorando la percepción de seguridad y obstaculizando la implementación equitativa de las políticas. Aunque el RASCI ha mejorado la coordinación en la ciudad, es urgente una revisión del Decreto para adaptarlo a los nuevos contextos criminales y mejorar la cobertura y la participación en las zonas más necesitadas.