Primeros estudios sobre la facultad de juzgar reflexionante y el juicio estético en Kant

Como bien sabemos, el sistema crítico Kantiano es un sistema de la totalidad, en donde la unidad es la simple expresión de la conmensurabilidad de lo múltiple. El todo sistemático de la filosofía es pensado y estudiado desde las facultades superiores del conocimiento, a saber, entendimiento y razón....

Full description

Autores:
Traslaviña Flórez, Javier
Tipo de recurso:
http://purl.org/coar/version/c_b1a7d7d4d402bcce
Fecha de publicación:
2008
Institución:
Universidad Industrial de Santander
Repositorio:
Repositorio UIS
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:noesis.uis.edu.co:20.500.14071/21476
Acceso en línea:
https://noesis.uis.edu.co/handle/20.500.14071/21476
https://noesis.uis.edu.co
Palabra clave:
Facultad de Juzgar reflexionante
Juicio Estético
Placer Displacer
Filosofía Sistemática
Judging School reflexionante
Aesthetic Reckoning
Placer Displaced
Philosophy Systematics
Rights
License
Attribution-NonCommercial 4.0 International (CC BY-NC 4.0)
Description
Summary:Como bien sabemos, el sistema crítico Kantiano es un sistema de la totalidad, en donde la unidad es la simple expresión de la conmensurabilidad de lo múltiple. El todo sistemático de la filosofía es pensado y estudiado desde las facultades superiores del conocimiento, a saber, entendimiento y razón. Cada facultad abarca una parte fundamental de la filosofía: la teoría intelectiva y los actos racionales. En este trabajo se presenta una tercera facultad superior denominada facultad de juzgar reflexionante que al igual que las otras facultades superiores, consta de un principio supremo y fundamento a priori: conformidad a fin. Dicho principio alberga la funcionalidad real de esta facultad: el puente o vínculo entre la teoría y la práctica que se hallaban en las anteriores críticas de Kant distanciadas de una forma noumenal; conformidad a fin resguarda relación con las formas naturales de los objetos representadas subjetivamente, y su intención verdadera es lograr unidades empíricas superiores a modo de leyes mayores en la diversidad contingente de la exterioridad experienciable, a través de un proceso lógico inductivo para que, siendo conforme con las formas y leyes naturales, y a fin con la finalidad de las estructuras y los actos mismos, el intelecto logre por la mediación reflexiva del juzgar, la posibilidad de acceder a esa heterogeneidad e inconmensurabilidad que se le hacia de difícil adecuación por su carácter determinante y general. Esta acción la logra la facultad de juzgar desde su uso reflexionante a partir de la instauración de los juicios estéticos de reflexión: Aquello que hace pleno de captación al objeto desde su misma representación y no desde el concepto establecido, logra en los estatutos de la formalidad, gracias al placer o displacer que se ha generado en el sujeto afectado, instituirse en el plano estético a modo de reflexión de la cualidad innata que le hace ser lo que es desde su misma representación; reflexión que al ser común en todos los objetos posibles de reflexión, permite encontrar lo característico y símil en la relación entre ellos, ascendiendo de esa contingencia a un grado mayor de generalidad y a su vez de unidad empírica para que el entendimiento pueda representarse categóricamente un tanto mejor la exterioridad que se le presenta por medio de los sentidos. Esta unidad común de los objetos se logra a partir del enjuiciamiento reflexivo sobre lo bello y lo sublime de los objetos y de la comunicabilidad de ese sentir que podamos efectuar. Con la crítica del juicio y el estudio sobre la facultad de juzgar reflexionante podemos comprender la relación real de la obra tripartita Kantiana sobre el todo sistemático de la filosofía y de las legislaciones naturales, morales y reflexivas que se relacionan conjuntamente en el vínculo empírico del sujeto y el mundo