Tomás González: el camino hacia la levedad

RESUMEN: A Tomás González sería posible definirlo como un escritor prolífico, por todas sus novelas —Primero estaba el mar (1983), Para antes del olvido (1987), La historia de Horacio (2000), Los caballitos del diablo (2003), Abraham entre bandidos (2010), La luz difícil (2011), Temporal (2013), Nie...

Full description

Autores:
Vergara Aguirre, Andrés Antonio
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2019
Institución:
Universidad de Antioquia
Repositorio:
Repositorio UdeA
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bibliotecadigital.udea.edu.co:10495/35339
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/10495/35339
Palabra clave:
González, Tomás, 1950- - Entrevista
Entrevistas
Interviewing
Rights
openAccess
License
http://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/2.5/co/
Description
Summary:RESUMEN: A Tomás González sería posible definirlo como un escritor prolífico, por todas sus novelas —Primero estaba el mar (1983), Para antes del olvido (1987), La historia de Horacio (2000), Los caballitos del diablo (2003), Abraham entre bandidos (2010), La luz difícil (2011), Temporal (2013), Niebla al mediodía (2015) y Las noches todas (2018)—, por sus tres libros de cuentos —El rey del Honka-Monka (1995), El lejano amor de los extraños (2013) y El expreso del sol (2016)— y por sus poemas, publicados en el volumen Manglares (1997). Sin embargo, también podríamos dudar de que ese término resulte pertinente para referirnos a él, porque después de su primera novela, parece que inició un camino en busca de la brevedad. Es más: aunque no haya certeza de que leyó las Seis propuestas para el próximo milenio, de Italo Calvino, tras leer su obra uno podría quedar convencido de que sí lo hizo, y que desde entonces acogió como su principio esencial en la escritura la búsqueda de la levedad, considerada esta “más como un valor que como un defecto”, según lo advirtió en su conferencia el escritor italiano, en la cual hizo énfasis en que una de sus propias búsquedas como escritor había sido precisamente la levedad: “mi labor ha consistido las más de las veces en sustraer peso; he tratado de quitar peso a las figuras humanas, a los cuerpos celestes, a las ciudades; he tratado, sobre todo, de quitar peso a la estructura del relato y al lenguaje” (Calvino, 1994, p. 15).