Patricia Nieto: la importancia de la voz propia

RESUMEN: Patricia Nieto Nieto, comunicadora social-periodista de la Universidad de Antioquia, carrera a la que ingresó cuando ya había descubierto el gusto por las historias, en parte quizá por la bibliotecaria Mirian Correa, que en la pequeña biblioteca de su pueblo, Sonsón, compartía con ella y co...

Full description

Autores:
Vergara Aguirre, Andrés Antonio
Tipo de recurso:
Article of journal
Fecha de publicación:
2020
Institución:
Universidad de Antioquia
Repositorio:
Repositorio UdeA
Idioma:
spa
OAI Identifier:
oai:bibliotecadigital.udea.edu.co:10495/35345
Acceso en línea:
https://hdl.handle.net/10495/35345
Palabra clave:
Nieto Nieto, Patricia, 1968- - Entrevista
Entrevistas
Interviewing
Rights
openAccess
License
https://creativecommons.org/licenses/by-nc-sa/4.0/
Description
Summary:RESUMEN: Patricia Nieto Nieto, comunicadora social-periodista de la Universidad de Antioquia, carrera a la que ingresó cuando ya había descubierto el gusto por las historias, en parte quizá por la bibliotecaria Mirian Correa, que en la pequeña biblioteca de su pueblo, Sonsón, compartía con ella y con otros niños su pasión por los relatos infantiles, y de la que también aprendió que incluso se podían decir las palabras prohibidas, cuando Mirian les decía: “niños: las malas palabras no existen”. Y también le mostró la importancia de ver los detalles. En parte también porque cuando iniciaba el bachillerato, Gabriel García Márquez recibió el Nobel, y se puso de moda en los colegios. “Me acuerdo particularmente del cuento ‘La siesta del martes’, que me conmovió mucho, me fascinó. Y por esa misma época nos pusieron a leer Las venas abiertas de América Latina, de Galeano, y Colombia amarga, de Castro Caycedo, unos relatos de narración sofisticada pero con la urgencia y la imperfección del reportero, y ese fue como el triángulo que despertó mi interés por esta carrera: la literatura, América Latina y el periodismo”. Claro, también están los créditos para sus papás, que desde muy niña la familiarizaron con el mundo de los libros y del saber: ella, maestra de escuela, y él, profesor de filosofía y de matemáticas en el colegio.