Una década de estudios sobre la hipertensión arterial, su relación con dietas altas en sodio y el sedentarismo
La hipertensión arterial constituye uno de los principales trastornos de salud pública a escala global y la incidencia persiste debido a factores modificables como el consumo elevado de sodio y el sedentarismo. Este trabajo tuvo como objetivo analizar cómo el consumo prolongado de sodio y la inactiv...
- Autores:
-
Jaramillo Garcia, Laura
- Tipo de recurso:
- Fecha de publicación:
- 2025
- Institución:
- Universidad Libre
- Repositorio:
- RIU - Repositorio Institucional UniLibre
- Idioma:
- OAI Identifier:
- oai:repository.unilibre.edu.co:10901/32263
- Acceso en línea:
- https://hdl.handle.net/10901/32263
- Palabra clave:
- Sedentarismo
Sodio
Hipertensión Arterial
Factores de riesgo
Alimentación
Sedentary Behavior
Sodium
Hypertension
Risk Factors
Diet
- Rights
- License
- http://purl.org/coar/access_right/c_abf2
| Summary: | La hipertensión arterial constituye uno de los principales trastornos de salud pública a escala global y la incidencia persiste debido a factores modificables como el consumo elevado de sodio y el sedentarismo. Este trabajo tuvo como objetivo analizar cómo el consumo prolongado de sodio y la inactividad física contribuyen al desarrollo de hipertensión arterial en adultos, a partir de una revisión sistemática de la literatura científica dada a conocer entre 2014-2024. Se siguieron los lineamientos PRISMA 2020 y AMSTAR-2 para garantizar rigor metodológico, realizando búsquedas en PubMed, SciELO, Scopus, ScienceDirect, Elsevier y Google Académico. Se incluyeron 20 estudios (observacionales, ensayos clínicos y metaanálisis) con adecuada calidad metodológica; los artículos en inglés fueron traducidos mediante herramientas acreditadas de traducción científica para evitar sesgos idiomáticos. Los resultados mostraron claramente que hay una conexión directa entre el consumo elevado de sodio y el aumento de la presión arterial. De hecho, reducciones moderadas (≤2 g/día) pueden llevar a descensos sostenidos de hasta 8,7 mmHg en la presión sistólica. Además, se observó que el sedentarismo prolongado duplica el riesgo de hipertensión y mortalidad cardiovascular, incluso cuando se ajustan otros factores. También se detectó una brecha significativa entre lo que la gente sabe y lo que realmente practica en cuanto a hábitos saludables, especialmente entre los adultos mayores y los hombres, quienes tienen una baja adherencia a la dieta DASH y escaso seguimiento nutricional (9). En la discusión se resalta que la hipertensión arterial es el resultado de una interacción compleja entre varios factores, donde una dieta rica en sodio y la falta de actividad física se combinan de manera sinérgica. Se llega a la conclusión de que las estrategias más efectivas para prevenirla incluyen una reducción gradual del sodio, fomentar la actividad física regular y establecer políticas públicas que promuevan la educación alimentaria y la creación de entornos saludables (24). |
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